“Estuve impresionado por la emergencia de actuar. El conocimiento no es suficiente; hay que aplicarlo. Estar disponible no es suficiente; hay que pasar a la acción.”
(Leonardo Da Vinci)
Baranería
“Estuve impresionado por la emergencia de actuar. El conocimiento no es suficiente; hay que aplicarlo. Estar disponible no es suficiente; hay que pasar a la acción.”
(Leonardo Da Vinci)
Construimos para que la Humanidad evolucione
¿De qué se trata?
Nuestra evolución, al contrario de la de los animales, es principalmente un proceso mental.
Nuestra noción sobre el Mundo es la que cultiva modelos comportamentales en nosotros y nos empuja hacia ciertas disposiciones.
En consecuencia, un entendimiento erróneo de la Naturaleza y del Ello alimenta la bestia del interior, adormeciendo nuestras necesidades equivocadas.
Para evitar esto, hay que evaluar, entender y definir a los problemas que hay que apaciguar y cuáles necesidades hay que satisfacer.
Aunque la Godinciología nos permite llegar a las perspectivas verídicas sobre Naturaleza y el Ello, para crecer de verdad en conformidad con nuestra esencia, hay que transformar nuestros conocimientos adquiridos en todos los medios tangibles que nos permiten un tal crecimiento.
La tecnología es muy útil en este sentido debido a su relación sinérgica con la sociedad, porque puede facilitar los objetivos socio-políticos.
No obstante, para evitar la degeneración social, catalizada por la prostitución tecnológica, hay que desarrollar y utilizar medios tangibles adecuados que nos permitan nuestro crecimiento ¨verdadero¨.
Es aquí donde entra en juego la Baranería.
Al grano
De forma más sencilla, la Baranería es para la Godinciología lo que la Ingeniería es para la Ciencia, en otras palabras, la Baranería es la forma aplicada de la Godinciología.
Por consiguiente, nosotros, los de Godinci, estamos dispuestos a ayudaros a convertirse en una segunda generación de Leonardo Da Vinci, mostrándoles cómo transformar sus conocimientos adquiridos en elementos tangibles y aplicaciones que puedan facilitarle y acelerarle la evolución individual y colectiva hacia nuestro propósito cósmico.
Así que cada uno de nosotros, en conformidad con las propias habilidades y capacidades mentales, puede ser un participante activo en la planificación, desarrollo, mejoramiento y preservación de la Baracrácia, generando e implementando todas las maravillas que facilita nuestro verdadero crecimiento.
